Carta abierta de la Escuela Brasileña de Psicoanálisis en defensa de la democracia
Estamos a unas semanas del segundo turno de una
elección que se centrará en los cimientos de nuestra República y más
radicalmente, en una elección entre el odio o la democracia, entre el espíritu
de las leyes o una violencia sin frenos. En el vacío de una crisis de la
política representativa y de una pérdida de confianza en las instituciones, una
parte significativa de la población brasileña da
rienda suelta a un discurso de odio que pasa a proliferar en la escena social,
trayendo consigo expresiones típicas del fascismo. El fanatismo y el terror. La
instauración de este discurso en toda su virulencia en el vínculo social y en
el espacio público implica un retroceso sin precedentes en relación con los
avances que el régimen democrático precipitó en sus tres últimas décadas en
Brasil. Este vino autoritario y dogmático que florece en la subjetividad de la
época requiere, con urgencia, lectura e interpretación.
La democracia tiene una relación directa con la vida, porque, como el psicoanálisis nos enseña, está atravesada por los acontecimientos contingentes que marcan la historia política de un pueblo. Depende de nosotros, psicoanalistas, seguir dando lugar a las palabras y a los actos que honran nuestros lazos con la democracia y las libertades públicas. Estos son los impulsores del deseo que esta carta abierta suscribe, como consecuencia del habla y de la presencia de los numerosos miembros de la Escuela Brasileña de Psicoanálisis que participaron en la conversación "Psicoanálisis y democracia", promovida por la Movida Zadig-Brasil / "Dulces bárbaros”.
Una manifestación
como escuela, por lo tanto, sólo podría derivarse de la práctica de la
conversación como acto político, y como consecuencia de una elaboración
provocada en este momento de Asumir la defensa de la democracia en este difícil
y grave momento de la historia de nuestro país exige establecer una base
permanente de movilización y diálogo con los núcleos ilustrados de la sociedad
civil, a través de nuestra red de política lacaniana, la movida pero -
Esperamos que en los próximos días los movimientos y las fuerzas políticas que
se refugian en el más auténtico espíritu republicano sepan proteger y defender
la democracia.
La Escuela Brasileña
de Psicoanálisis reafirma su firme defensa de estos valores fundamentales, y su
rechazo a los discursos de odio, que promueven la ruina de la sociedad y de la
cultura, y cuyos resultados, la historia nos enseña, son un empuje hacia la
catástrofe.
Jesús Santiago (responsable de la Movida Zadig-Brasil / "Dulces
bárbaros")Lucíola Freitas de Macêdo (Presidente de la EBP)
Luiz Fernando Carrijo da Cunha (Director de EBP).
Nota: Tomado del muro de la red social “Facebook” de Sérgio Laia.
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